El día 5 de junio los estudiantes de la Escuela de Comercio de la PUCV nos reunimos (en la tarde) en la tercera jornada reflexiva en la cual se analizó críticamente la respuesta que el gobierno entregó a nuestros pares secundarios. Las conclusiones que se generaron después de un arduo debate, fueron presentadas en nuestra respectiva asamblea donde se dio el espacio para que los estudiantes pudieran expresar sus diversas opiniones. Nuestra asamblea, por medio de votación libre, decidió por mayoría continuar en paro de actividades los días miércoles y jueves con ratificación este último día, cuyo principal objetivo sería el análisis de la LOCE desde un punto de vista económico, actividad que fue truncada por la situación actual del edificio que era el punto de encuentro.
Ese mismo día, después que nos retirábamos de nuestra asamblea, un grupo estudiantes de la carrera de Castellano procedió tomarse las dependencias, violando así, de forma autoritaria e intolerante, la decisión emanada del Consejo de Edificio, lo que implica a su vez una grave falta a la democracia interna y nos aleja cada vez más de la tan anhelada triestamentalidad. Entendemos que una toma es una herramienta y no un objetivo en si mismo, además la visualizamos como una medida de presión valida cuando se propone un objetivo claro y común, haciendo partícipe a todas las carreras del edificio que se encuentra ocupado. Esta acción nos ha perjudicado directamente todo el trabajo que llevábamos como escuela, reduciendo así la posibilidad de aportar a la reconstrucción del movimiento estudiantil de nuestra universidad.
Nuestra opinión es que, en esta toma, no queda en evidencia todo lo antes mencionados ya que no existe un plan de trabajo, ni un plan de autodefensa y el objetivo lo consideramos muy ambiguo y generalizado, por lo tanto repudiamos de forma categórica la acción llevada a cabo por los estudiantes de Castellano.
Por lo antes expuesto es que no nos adherimos a esta toma debido a que nuestro fundamento está legitimado y respaldado por nuestra asamblea de estudiantes y por la votación que se dio en la misma.
CAA. COMERCIO
Ese mismo día, después que nos retirábamos de nuestra asamblea, un grupo estudiantes de la carrera de Castellano procedió tomarse las dependencias, violando así, de forma autoritaria e intolerante, la decisión emanada del Consejo de Edificio, lo que implica a su vez una grave falta a la democracia interna y nos aleja cada vez más de la tan anhelada triestamentalidad. Entendemos que una toma es una herramienta y no un objetivo en si mismo, además la visualizamos como una medida de presión valida cuando se propone un objetivo claro y común, haciendo partícipe a todas las carreras del edificio que se encuentra ocupado. Esta acción nos ha perjudicado directamente todo el trabajo que llevábamos como escuela, reduciendo así la posibilidad de aportar a la reconstrucción del movimiento estudiantil de nuestra universidad.
Nuestra opinión es que, en esta toma, no queda en evidencia todo lo antes mencionados ya que no existe un plan de trabajo, ni un plan de autodefensa y el objetivo lo consideramos muy ambiguo y generalizado, por lo tanto repudiamos de forma categórica la acción llevada a cabo por los estudiantes de Castellano.
Por lo antes expuesto es que no nos adherimos a esta toma debido a que nuestro fundamento está legitimado y respaldado por nuestra asamblea de estudiantes y por la votación que se dio en la misma.
CAA. COMERCIO
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